Los casos de sarampión autóctono retornaron al país luego de 18 años.
Al respecto, el otrora responsable del Garrahan y actual director de del Instituto Revisor de Políticas Sociales y Acceso a la Salud de la Defensoría del Pueblo, Oscar Trotta, explicó: “Ha caído la cobertura de vacunas, porque el Ministerio de Salud ha decidido desarticular todos los programas de abordaje territorial de vacunación y ha relegado la actividad de vacunas a los centros asistenciales”. “Muchas provincias ya habían denunciado que las vacunas ni llegaban”, contó. También hubo un aumento de casos de tuberculosis y sífilis como consecuencia del deterioro de “las políticas públicas en general y las políticas sociales que sufren el impacto de la crisis económica”.
“Desde el 2000 no había aparecido ningún caso hasta ahora. Había algunos casos que habían surgido a partir de lo que se conoce como “casos importados” que son casos que se contagian en zonas endémicas de otros países y se desarrollaron acá en la Argentina. En los dos casos de ahora son autóctonos, que los chiquitos no han viajado a zona endémica”, aseguró Trotta en diálogo con un programa radial.
“Hoy tenemos el problema con el sarampión, pero nosotros venimos advirtiendo que muchas otras enfermedades infectocontagiosas van resurgiendo y que en Argentina estaban controladas, y están volviendo a aparecer porque el sistema de salud está siendo deteriorado por las políticas públicas en general y las políticas sociales que sufren el impacto de la crisis económica”, sostuvo el exdirector del Garrahan.
Trotta afirmó que el Ministerio de Salud sacó los programas que llevaba a cabo la gestión anterior y añadió que “ha remitido a la vacunación a los centros de salud y a los hospitales, y obliga a la población a acercarse a esos lugares. Muchas provincias ya habían denunciado que las vacunas ni llegaban”.
Síntomas y consecuencias del sarampión
Trotta explicó que los primeros síntomas son “fiebre, triple catarro, es decir, los ojos, la nariz y la garganta, aparición de un exantema y las poblaciones vulnerables, como las embarazadas, los niños o los inmunodeprimidos pueden llevarles a una neumonía, que es la causa más grave”
“Hay que estar alerta si aparece una fiebre de más de 38 grados en los niños, o un catarro persistente en la vía respiratoria superior y consultar rápidamente al médico”, sostuvo el Director del Instituto de Políticas Sociales y Acceso a la Salud de la Defensoría del Pueblo.
Trotta aseguró que “puede aparecer en cualquier edad, pero es más peligroso en los menores de un año porque esa población todavía no se vacuna porque hay que esperar a que haya cierto desarrollo del sistema inmunológico”.
fuente: Radio Caput