EL VOTO INDÍGENA: TERROR DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS La total unificación de los Pueblos Originarios en el Norte de Salta conforma un hito en la política nacional.

“Mucha gente dice que el pueblo originario está desunido. Pero si estuviera desunido no pasaría una cosa histórica como la que pasa hoy que tenemos un Intendente wichí” dijo el cantante JORGE ROJAS.

Con absoluta participación de los caciques y las comunidades indígenas del norte Salteño, comenzó la planificación de lo que en política indígena se denomina, Plan de Democratización de Representación, y en la oportunidad de la última cumbre indígena en Santa Victoria Este, se recibió la sorpresa de mejor aliado de los lugareños, el cantautor Jorge Rojas.

Fue recibido por la totalidad del municipio wichí e invitado a compartir la mesa política y dirigir unas palabras a todo Santa Victoria Este.

 Vecinos, vecinas, ex compañeros de escuela, conocidos de la zona, dieron la bienvenida al artista oriundo de estas tierras y escucharon atentamente, sus experiencias y el trabajo social que realiza con una profunda convicción y arraigo en su pueblo nativo 

La convocatoria a este hecho sin precedentes, fue agradecida por el mismo artista salteño y resaltó que es la primera vez que se organiza un espacio para comunicar a las personas de la manera que se hizo.

Fue entonces que por iniciativa del Intendente wichí, ROGELIO NERÓN, todas las comunidades y pueblo en general dio el presente a esa cita.

La generosidad y respeto de los pueblos originarios causó una profunda emoción a Rojas, quien estuvo allí, conociendo también las experiencias y necesidades de sus paisanos.

Lo acontecido es una muestra cabal que las viejas prácticas de la manipulación tirana sobre indígenas, ya no tiene cabida, constituyendo el hecho como el final de la carrera política de representación forzosa que sostuvo por casi tres décadas, Mashur Lapad.

 Actualmente, desde los propios pueblos originarios nace la inquietud de ampliar la mirada sobre los referentes que son legítimos del Chacosalteño y que no olvidan el vínculo afectivo con las personas y la tierra que los vio nacer.

Así es que la agenda social y política, indígena, se ve favorecida con este gesto de unificación que denota nuevos escenarios y actores, e incluso miradas optimistas, porque la visibilización de salteños y salteñas de la zona fronteriza, ya no se reduce a las múltiples limitaciones de la pobreza, sino a la fuerza y la resiliencia por las que son capaces de organizarse con el objetivo de lograr mejoras imprescindibles para el departamento, un ejemplo para toda la Provincia.

 

 

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