200 años tuvieron que pasar para que por fin, se respete el derecho a la identidad originaria.
Es tan terrible contarlo que da pudor y vergüenza. Sin embargo, la buena noticia es que por fin en el propio territorio indígena, se trabajará de modo amplio para la gestión y otorgamiento del documento nacional de identidad (DNI) a todo ciudadano o ciudadana, originarios, que así lo requiera.
En el marco y a consecuencia, además, del importante derecho a la identidad de las personas, que a partir de la próxima semana podrán tener asegurado, con garantías constitucionales, el acceso a los trámites públicos, de índole social y privado, imprescindibles para sobrevivir o convivir en una zona que debe constituir todo desde cero. Territorios, si los hay, que debieran ser la imperiosa prioridad de todas las gestiones ejecutivas nacionales y provinciales, en general y con la tramitación del DNI en particular.
En un análisis más detallado se puede inferir que la documentación manipulada por cientos de años, en nuestro país y en especial en este distrito electoral, se hizo en un contexto de ilegitimidad, pues, partidos políticos, las bancas legislativas y demás espacios en época de elecciones, aseguran que una buena parte de su masa de afiliados y afiliadas corresponden a esta zona, no obstante, si los DNI sólo se arbitran para cuando la mega estructura del negocio comicial le conviene a los que NO SON ORIGINARIOS, se explica en gran medida que las representaciones políticas surjan a beneficio de personas que no sienten el más mínimo compromiso con la agenda de las comunidades indígenas y a su vez, muestren el fuerte abandono que padecen a lo largo y ancho del país, durante tantos años.
Política indígena y decisión política
Esta manipulación de los derechos humanos, a la identidad, a ser elegidos y elegir, a los beneficios sociales, las prestaciones públicas, entre muchos otros que son conculcados por el “negocio de la política” fue el objetivo de lucha que logro exponer el intendente Wichí ROGELIO NERÓN, quien es acompañado por el equipo legal de abogados Indígenas que lo secundan y el mismísimo -CNPI- Consejo Nacional de Política Indígena, que a través de comunicación directa con el Ministerio del Interior de la Nación, lograron la viabilidad absoluta a la defensa de los derechos específicos.
La política indígena se instala en el país con la posición estratégica más increíble de los últimos 200 años, situación que deja en descubierto a medios de comunicación monopólicos que están implicados directamente por promocionar figuras de movimientos o partidos que carecen de legítimidad con esta situación y resultarían poseedores de parte del manejo legislativo y judicial con fundamentos de poderosa ilegitimidad y dudosa legalidad.
Asimismo, desde el Gobierno Nacional, comprendieron que estos argumentos son factibles y por tanto, emanaron nuevas directivas de acompañamiento para las gestiones Originarias, con el fin de fortalecer el sistema de entregas de DNI y los operativos de trámites zonales, sin responder a las órdenes de punteros o jefes políticos, o cabecillas partidarios.
Un sistema correcto para todos y todas
Siempre debería haber funcionado así. Si esto, sucede con los indígenas, da qué pensar de las sorpresas que deparan los esquemas partidarios en el resto del país. Pues lo acontecido en el Chacosalteño, pone, al menos, en dudas al resto del sistema de empadronamiento electoral.
Hay que lograr el respeto por la voluntad ciudadana originaria y no permitir que sigan expuestos y utilizados para los intereses de la mezquindad política en la que se les promete el DNI para ir a votar en favor de una figura que ni siquiera pertenece a los pueblos originarios, que no maneja su idioma, no conoce el territorio, ni comparte su historia, ni su cultura.
O en el peor de los casos, comerciarles el hambre con los beneficios sociales, a cambio de firmar o figurar en planillas para habilitación de partidos que quieren erigir en pleno fragor de la pelea entre las Organizaciones populares y los Gobiernos.
Nerón ha logrado liberar a los pueblos, pero logró liberar para su pueblo Wichí, quitarlo de las garras de los foráneos y ajenos; acción que se hace extensiva también a todos los argentinos y argentinas que hasta ahora, fueron reducidos a meros objetos cuantificables para el uso del comercio electoral.
Foto de portada: Rogelio Nerón -ctro- acompañado por hermanos originarios de Paraguay -Filadelfia-