ADIUNSa convocó a reunión urgente para tratar la situación salarial y sindical, ante la falta de convocatoria a paritarias nacionales y el recorte efectivo sobre las jubilaciones de los docentes investigadores con dedicación exclusiva y el audedamiento de cuatro cuotas del FONID.
A sólo dos días de que se venza la última paritaria, y luego de que la inflación superara el incremento acordado en los salarios básicos, el gobierno aún no convocó a la mesa de negociación salarial de la docencia universitaria.
Por otra parte, la eliminación por decreto de la paritaria salarial docente nacional repercute en la “garantía salarial”, que fija el mínimo de bolsillo que debe cobrar un trabajador de la docencia universitaria: ese monto quedó determinado unilateralmente por el gobierno en función del Salario Mínimo, que también fue fijado por las propias autoridades de manera inconsulta.
A ese cuadro se suman las consecuencias inmediatas de la reforma previsional sobre nuestro sector, ya que la actualización otorgada para el mes de marzo produce un recorte sustancial para quienes se jubilaron como docentes e investigadores con dedicación exclusiva: aquellos a quienes se les exigieron condiciones especiales para acceder al 85% del salario activo (ley 22.929), ahora tendrán un aumento del 5,71%, mientras que quienes se jubilaron como docentes preuniversitarios verán un incremento del 11,65%, y los que se enmarcaron en la ley 26.502 (docentes universitarios sin los requisitos de investigación o sin dedicación exclusiva) recibirán una mejora del 13,40%.
Esos valores, además, revelan claramente que la reforma previsional significó un feroz recorte sobre las jubilaciones, ya que con la legislación derogada el 18 de diciembre pasado hubiera correspondido un aumento del orden del 11% al 13%, ya que los salarios de los docentes no fueron superiores a los de la mayoría de los sindicatos.
En ese marco, la CONADU Histórica convocó a un nuevo plenario de Secretarios Generales para analizar la situación y empezar a delinear un plan de lucha.
El escenario de deterioro en las condiciones salariales y laborales trasciende largamente al sector universitario, incluyendo los recortes y despidos que afectan al sistema científico y tecnológico nacional (afectando, por lo tanto, a la soberanía misma de nuestro país). Es por eso que consideramos imprescindible continuar coordinando las acciones gremiales con otros sectores, impulsando la elaboración de un plan de lucha y un paro nacional activos.